miércoles, febrero 13, 2013

Por preguntón parte 2.

Estimados lectores pues andamos con mil de trabajo y mil de historias, definitivamente llegar a las 10 mil visitas me ha motivado bastante. Con ustedes una historia que me acaba de pasar hace unos segundos.

Era una caliente tarde con un frío aire corriendo, como de costumbre al medio día  ademas de comer me toca leer la Biblia y estudiar la lección (cosas que hacen los cristianos). Me estaba quedando abrazado en los brazos de morfeo cuando escuche a alguien entrar, era una joven alta acompañada por su suegra. Desde que llegó noté que tenia un dolor, la posición era característica.

Inicié el interrogatorio y a cucharaditas pude obtener la historia completa, la señorita en cuestión había tenido relaciones sexuales sin protección con el hijo de su suegra, pero como no quería estar embarazada decidió (sabiendo que estaba embarazada) aplicarse una inyección anticonceptiva. Tuvo su aborto, fue al hospital donde le hicieron un legrado y ahora venia conmigo por el dolor intenso que le había quedado en el abdomen.

Usualmente no llegan pacientes así  y sabiendo el gran problema legal que ella pudo haberse ocasionado le dije: señorita usted debería estar presa por asesinato. En ese momento pude observar como las glándulas lagrimales comenzaban a trabajar pero cuando dije la siguiente frase no espere que fuera a reaccionar como lo hizo. Usualmente no soy así tan enérgico pero este caso si lo a meritaba.

Me contuve y le dije: joven usted va a arder por la eternidad en los lagos del infierno por el asesinato que acaba de hacer.  Lo siguiente que paso es muy parecido a este video.



La joven comenzó a llorar, pero no lloraba poquito, lloraba como si las llamas del hades estuvieran carcomiendole el esfinter anal externo. Las lagrimas podrían haber llenado la presa de el cuchillo (que esta casi seca ahorita), es mas hasta casi me resbalo al salir del consultorio a buscarle un poco de papel. Dentro de su lloro inconsolable le decía a su suegra : no quiero quemarme por la eternidad.

Yo no sabia si reírme o llorar con ella (obviamente no creo que exista el infierno para quemarnos por la eternidad, si habrá infierno pero nos moriremos rápido) las lagrimas salían y salían como cuando mi hermano va al baño de mi casa y lo tapa. Después de casi medio rollo utilizado en secarle las lagrimas la señorita o ex señorita me dijo: -- Doctor por favor haga algo para que no me vaya al infierno-- le quise jugar una pequeña broma y le dije que se fuera hasta su casa de rodillas jaaj y cuando ella intento levantarse para irse de rodillas...tuve que aguantarme las ganas. 

Le recordé que Dios es amor y que el la puede perdonar, le di su receta, compro su medicina y se fue no sin antes intentar besar mi mano (ni que fuera yo el papa) no la deje y la despedí. Después que se fue no deje de reírme como por 15 minutos ajajaj y aun me sigo riendo. 

PDT que les sirva de escarmiento a esas niñas y niños que andan jugando con fuego.

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